Nuestro querido Pincho ,es otro de los muchos perritos que tras el fallecimiento de su dueño fue a parar a una familia que se lo quedo, pero de forma temporal.
Acostumbrado a vivir en una casa, pasó a estar en un jardín con una perrita pastor alemán, y no llevaba bien no poder entrar en la vivienda.
Es un poco obsesivo con la pelota, quizá porque cuando no lo dejaban entrar al hogar familiar él y su entonces compañera ,era la única distracción que tenían.
Este encantador perrito, no lleva muy bien el estar en un chenil, es muy activo, necesita salir porque una vez que sale a su recreo y se desestresa, es muy dócil. Pincho ahora es compañero de chenil de la galguita Corneta, ya que había quedado triste después de la adopción de su inseparable compañero Klaus.
Si los voluntarios , le prestan atención, el tema de la pelota se corrige atiende a su nombre y se sienta cuando se lo pides…
Comparte recreo con 4 o cinco perritas y se hace amigo de todas, le encantan también los baños de piscina.
Necesita una familia, seguro que en algún lugar está esperándolo, una familia que juegue ,corra con él para gastar toda esa energía que tiene para luego terminar dormido junto a ellos en un sofá o en su blanda camita junto a ti.
Esa familia que ya tuvo antes del fallecimiento de su compañero humano.
Es súper cariñoso con los voluntarios, e incluso con los extraños. Tiene muchísimo amor para dar.
