Abril es una perrita cruce de labrador de color negro. A sus dos añitos de edad ya conoce lo que es el abandono y la enfermedad. Estuvo vagando durante meses hasta que en Septiembre de 2013 en un centro deportivo cercano a Zaragoza encontró refugio y unas buenas personas empezaron a alimentarla hasta que se hizo dueña de sus corazones.
Las duras condiciones del abandono acabaron haciendo mella y enfermó gravemente. Nos avisaron a finales de Abril, de ahí su nombre. Y tuvo que ser operada de urgencia por una infección de útero (piometra) que pudo haberle causado la muerte en pocas horas.Tras la operación se ha recuperado y es una perra totalmente sana.
Los primeros días su mirada reflejaba una inmensa tristeza pero diez días después parece una perra diferente a la que llegó a nuestras instalaciones.
Abril es una perra muy cariñosa, se acerca moviendo su rabo para que la acaricies y reconoce con gran alegría a las personas que la cuidaron cuando vienen a verla ya que durante ese tiempo le cogieron un gran cariño. Es una perrita muy sociable con machos y hembras y según nos han contado en el centro deportivo se relacionaba perfectamente con todo el mundo y le encantaba que los niños acariciaran su barriguita.
Viaja perfectamente en coche si bien no está acostumbrada a ir con correa. Suponemos que nunca ha sabido lo que es un paseo acompañada por su dueño y tendrá que aprender.
Abril ha sufrido mucho para su corta edad pero ha vuelto a la vida porque está esperando que alguien como tú la abrace y darte todo el amor que guarda en su bello cuerpo azabache. Alguien debe darle la oportunidad de tener por fin un hogar donde ser enteramente felíz.